jueves, 20 de mayo de 2010

Corazones que se desangran ante la alegría

Si en algún momento tuvimos que encontrarnos, íbamos con los ojos vendados y solo sentimos nuestros pasos sonoros confundiéndose melódicamente.
Y aunque nuestros corazones se alegraran ante tan dulce sonido, no logramos distinguir que era, ni lo que significaba, solo era una melodía que flotaba en el aire...
una inolvidable y eterna melodía.

Un día, llegó la hora de quitarse las vendas... y ante nuestros ojos maravillados apareció un mundo lleno de colores... sin embargo, esa melodía no terminaba nunca de sonar...

Siempre te busqué, sabía como encontrarte... pero nunca volvimos a cruzar los caminos con la misma melodía... los sonidos habían cambiado, un nuevo ritmo se unía a la danza de tonalidades... el ritmo de un corazón que día a día dejaba de soñar, que poco a poco perdía su fuerza, y que simplemente no quiso cantar más... nunca más.

martes, 18 de mayo de 2010

Entre el horror y una gota de sangre

Si te miro a los ojos, sé que en ellos no me reflejaré, pues llenos de sombras están, llenos de dolor y resentimientos... entonces, querré salir corriendo.
Abandonarte.
Dejarte lejos, en el pasado de los tiempos.
Perdido entre los rosales infructíferos, secos de tanto llorar, cargados de espinas...
Pero no corro... me pierdo en aquellos pozos negros y sombríos, y ni siquiera alcanza mi fuerza para esbozar un grito, me dominan, estoy en cautiverio frente a tu mirada.
Mi mente divaga, insana. Dibuja paisajes soleados, cuando a nuestro alrededor todo es ruinas. La cordura se ha escapado por los rincones de los labios silenciados, se escapa en un hilo sonoro, en una melodía decadente...
Y entre murmullos disonantes, ya no sé nada más... me pierdo en un grito sintiendo como desgarras mi piel...